Almas Encallecidas

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Optimized-indiferencia336Teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos a la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón; los cuales después que perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de impureza. (Efesios 4:18-19)

¿Se ha cuestionado cual será la causa de tanta violencia, tanto abuso infantil, tanto crimen vicioso, etc.? La insensibilidad nos dice aquí el apóstol Pablo. La versión del N.T. siglo 20 traduce: “”habiendo perdido todo sentido de vergüenza”:  y la traducción de Godspeed es: “porque se encallecieron y se entregaron a la sensualidad”.  La Nueva Biblia Inglesa “Muertos a los sentimientos, se entregaron a la sensualidad”.  ¿Cuándo sabemos que le han salido callos al alma? Veamos lo que nos dice el apóstol Pablo en la carta a Los Romanos: “Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles. Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre si sus propios cuerpos.  (Romanos 1:21-24) ¿Qué otra explicación podría haber para la descomposición moral de nuestra sociedad?

La deslealtad, la irreverencia, la ingratitud y todos los males que se generan con estas actitudes son las consecuencias que padecemos. Familias disfuncionales, matrimonios amargados y en vías de divorcio, hijos rebeldes, adolescentes embarazadas prematuramente; son algunas de las consecuencias de la insensibilidad. Cuando nos acostumbramos a lo malo, no podemos distinguirlo de lo bueno. Hacemos lo que hacemos y no nos inmutamos; por eso herimos a los demás, y somos capaces de matar si es necesario para satisfacernos sin sentir la mas mínima pena o dolor. Ser insensible es morir en vida, es matar el alma. Si el alma es el asiento de nuestras emociones, perder las emociones es dejar que le salgan callos al alma. Necesitamos la sensibilidad para llorar de vez en cuando además de reír y celebrar la vida. Sino es así serás un ser amargado y carente de motivos para vivir.

¡Shalom!

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