Descubrimiento podría estar relacionado con el diluvio bíblico

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Hay descubrimientos que los científicos seculares no tienen explicación pero que los científicos cristianos entienden muy bien.

Uno de esos fue el hallazgo que hicieron un grupo de científicos que exploraban recientemente el océano Atlántico. Ellos descubrieron misteriosos nódulos metálicos en el fondo del océano. Para los científicos seculares no hay explicación, para los científicos creyentes este descubrimiento puede proporcionar evidencia sobre el diluvio que narra la Biblia.

Un equipo de investigación alemán anunció el descubrimiento de densos racimos de nódulos de manganeso en el suelo oceánico. Usando una malla de red destinada a recoger la vida marina, los investigadores accidentalmente descubrieron bolas de mineral de manganeso (más de tres millas por debajo de la superficie del agua).

Según la revista LiveScience, que reporta sobre hallazgos de la ciencia, algunos de los nódulos de manganeso eran tan grandes como bolas de boliche. Las cámaras submarinas revelaron que el fondo del océano estaba lleno de los nódulos metálicos, muchos de los cuales se asemejan a tortitas. Aunque han sido descubiertos nódulos similares en muchos lugares del fondo del océano, los expertos dicen que este es el más grande nódulo de manganeso que se ha encontrado en el Atlántico.

¿De dónde vienen estas formaciones? Los investigadores no están muy seguros porque este no suele ser el lugar donde se acostumbra a encontrar nódulos de manganeso.

Según los modelos tradicionales, los nódulos de manganeso se forman bajo el agua, poco a poco, añadiendo nuevas capas durante millones de años. Sin embargo, los científicos admiten que el origen de las bolas sigue siendo un misterio.

El Dr. Jake Hebert, un físico que trabaja con el Institute for Creation Research (Instituto para la investigación sobre la creación), cree que los nódulos no se formaron durante millones de años. Por el contrario, dice, que es probable que estos se formaron muy rápidamente.

En un artículo titulado “¿Son estos nódulos una evidencia del diluvio del Génesis?” Hebert dijo que “Estas bolitas metálicas aportan pruebas sólidas de que la mayoría de los sedimentos del fondo marino fueron depositados rápidamente, no lenta y gradualmente durante millones de años”. Hebert señala así los defectos aparentes de los métodos científicos seculares en relación con la fecha de los nódulos.

Los científicos seculares afirman que los nódulos crecen a un ritmo extremadamente lento, de sólo unos pocos milímetros por millón de años. Sin embargo, se han observado nódulos de manganeso creciendo consistentemente en lagos y embalses artificiales, así como en fragmentos de restos de la primera y segunda guerra mundial. Todos estos se han reproducido cientos de miles de veces más rápidamente que las tasas calculadas.

Hebert argumenta que los modelo de científicos creacionistas proporcionan mejores explicaciones sobre por qué se forman los nódulos y donde están ubicados.

“En los milenios después del diluvio, la deposición de sedimentos eventualmente se redujo a las tasas de hoy lentas y graduales”, escribió Hebert. “Por lo tanto, los nódulos se encuentran principalmente en las capas de sedimento superior porque estas capas superiores se depositaron lentamente lo suficiente para permitir que los nódulos crecieran.”

Cuando tomamos en cuenta el diluvio que se menciona en la Biblia los nódulos, ya no son un misterio.

“Los lotes de nódulos de manganeso son sólo una de las muchas características geológicas que son difíciles de explicar para los científicos seculares, pero que adquieren sentido a la luz del diluvio mencionado en Génesis,” afirmó Hebert.

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