Un buen tropiezo…

¿Te ha pasado que a veces te equivocas o por un accidente llegas a recibir una bendición?

Eso mismo sucedió con Rut que aunque fue hacia un destino, tropezó con otro. Su plan era recoger los granos de lo que quedaba en una cosecha, pero lo que ocurrió es que “Fue pues y llegando, espigó en el campo en pos de los segadores, y aconteció que aquella parte del campo era de Booz…” (Rut 2:3). Cuando Booz la llamó por su nombre, salió del anonimato a un lugar lleno de bendiciones y de prominencia. ¡Puede ocurrir así de rápido!. Rut recibió una gran sorpresa que le cambió la vida.

La vida de Rut había ido de mal en peor. Su esposo había muerto. Dejó su tierra y su entorno familiar, para vivir en un lugar donde no era aceptada. Estaba simplemente sobreviviendo, haciendo sacrificios y espigando con la única meta de obtener el sustento para ella y su suegra. ¡Entonces Dios dio un giro a las cosas! Los segadores deliberadamente dejaban caer más puñados de trigo para que ella pudiera recoger mas de lo habitual.

¿Sabías que Dios puede dejarte “un sendero con pequeñas sorpresas”? Después de haber luchado por tanto tiempo con una situación, Él puede dejar caer bendiciones en tu sendero y lo único que tienes que hacer es recogerlos. Aunque parezca que hoy todo va en contra de ti, no dejes que el enemigo te desanime y te haga retroceder quedándote a mitad de camino de la bendición que está preparada para tí.

Quizás has pasado demasiadas penurias y hasta estás comenzando a dejarte intimidar por el enemigo. Pero la buena noticia es que estás en camino de encontrarte con la bendición que Dios preparó para tu vida. “Y guiaré a los ciegos por camino que no sabían, les haré andar por sendas que no habían conocido; delante de ellos cambiaré las tinieblas en luz y lo escabroso en llanura. Estas cosas les haré y no los desampararé.” (Isaías 42:16).

Dios puede hacer que te “tropieces” con cosas buenas, que aunque no lo hayas planeado, te encuentres en el tiempo y lugar correctos, con la persona clave que tiene la respuesta apropiada para que cambie tu vida.

Tal vez veas algunas problemas como obstáculos, pero quizás sean solo oportunidades que Dios va regando por tu camino para que puedas recogerlas y usarlas.

Él tiene una manera de hacernos “tropezar” con bendiciones cuando lo seguimos sinceramente.

No desmayes, hoy puede ser el día de tu bendición. Dios puede cambiar el día malo en tiempo de completa victoria.

Por: Telma Céspedes