La patología del liderazgo cristiano

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Photo: Pixabay

En el ambiente cristiano, así como en cualquier esfera social,  hay líderes y líderes. ¿Qué es en esencia el liderazgo? Liderazgo es empoderar a otros no “acumular poder” para uno mismo. Y, por lo menos, el liderazgo cristiano señala a Jesús no a una persona (hombre o mujer) en específico.

Cuando alguien, siendo cristiano, acumula poder o centra toda la atención de una institución u organización hacia él mismo, está actuando desde su naturaleza de pecado y no desde una naturaleza transformada por el Espíritu Santo. No tiene “el don de liderazgo” sino que tiene una patología, una enfermedad psicológica, que se llama “megalomanía”. Eso es mucho más común que el supuesto don del Espíritu que algunos dicen que tienen.
El que lidera para Cristo lo hace como Cristo, se preocupa por observar bien los patrones de liderazgo de Jesús (por pocos que parezcan ser en las Escrituras) sus enseñanzas sobre “ser el primero” o “querer ser el mayor”, lo imita e imita su compasión, gracia, humildad, amor. Los líderes intocables, inalcanzables, los que necesitan un séquito de personas, los que te preguntan “¿no sabes quién soy yo?”, revelan un deseo de ser reconocidos y de llamar la atención y esa es su recompensa.

¿Eres líder? Imita a Cristo, quizás te tomará más tiempo, quizás te sea más difícil, pero al final es más “sano”.

¡Feliz resto del día!

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